El mito de que una pareja que lleva una vida sexual extremadamente apasionada y efusiva
tiene asegurado su futuro es simplemente falso. El contacto sexual (genital o no) es sólo una parte del conjunto de intercambios sentimentales posibles en la vida en pareja.
No son pocos los hombres y mujeres que carecen de apetito sexual pero tienen hambre de romance y erotismo. Romance para sentirse especiales, comprendidos y amados. Erotismo para confirmar que son objetos de deseo y seducción, que alguien gusta de ellos, que son atractivos
y que de forma inteligente, se los aprecia en toda su dimensión.
El sexo sin romance ni erotismo resulta una actividad, vinculada más con un contacto físico
vacío que con una intimidad espiritual real, un verdadero encuentro entre almas.
Por otro lado, el romance sin erotismo ni sexo peca de desapasionado, idealista y platónico.
El erotismo y la sexualidad representan para la pareja su contacto con la realidad, con sus diferencias y particularidades: Esto somos, ni más ni menos y por este motivo, nos amamos.
El romance, el erotismo y el sexo forman tres clases diferentes de comunicación entre
dos personas que se aman. Ninguna es más importante.
El secreto es definir claramente lo que erotiza, lo que sexualiza y lo que agrega romance
a la relación y alimentarlo día a día con palabras, detalles y acciones concretas.
tiene asegurado su futuro es simplemente falso. El contacto sexual (genital o no) es sólo una parte del conjunto de intercambios sentimentales posibles en la vida en pareja.
No son pocos los hombres y mujeres que carecen de apetito sexual pero tienen hambre de romance y erotismo. Romance para sentirse especiales, comprendidos y amados. Erotismo para confirmar que son objetos de deseo y seducción, que alguien gusta de ellos, que son atractivos
y que de forma inteligente, se los aprecia en toda su dimensión.
El sexo sin romance ni erotismo resulta una actividad, vinculada más con un contacto físico
vacío que con una intimidad espiritual real, un verdadero encuentro entre almas.
Por otro lado, el romance sin erotismo ni sexo peca de desapasionado, idealista y platónico.
El erotismo y la sexualidad representan para la pareja su contacto con la realidad, con sus diferencias y particularidades: Esto somos, ni más ni menos y por este motivo, nos amamos.
El romance, el erotismo y el sexo forman tres clases diferentes de comunicación entre
dos personas que se aman. Ninguna es más importante.
El secreto es definir claramente lo que erotiza, lo que sexualiza y lo que agrega romance
a la relación y alimentarlo día a día con palabras, detalles y acciones concretas.